LAS PROVINCIAS examina junto con IMEDValencia el diagnóstico y tratamiento del cáncerde próstata con profesionales y pacientes
El cáncer de próstata es la segunda enfermedad maligna más frecuente en hombres y la quinta causa de muerte por cáncer en el mundo, convirtiéndose en un tumor por el que fallecen aproximadamente 6.000 varones en España cada año, según la Asociación Contra el Cáncer de Próstata (ANCAP).
Pero, en el Día Mundial contra el cáncer de próstata que se celebra hoy, los motivos de esperanza son muchos, ya que hasta el 90 % de los casos presentan buen pronóstico y el 75% de los pacientes, es decir, 3 de cada 4, se curarán.
Gracias a la investigación, la supervivencia se ha incrementado un 20% en los últimos años, según los datos de incidencia de cáncer en España obtenidos por la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) y ANCAP. Este incremento de la supervivencia no puede entenderse sin una detección precoz y sin la mejora de la tecnología y la especialización médica en el diagnóstico y el tratamiento, un ámbito en el que IMED Valencia es líder.
Por ello, LAS PROVINCIAS organizó una mesa de expertos con IMED en la que sus profesionales, el doctor Roberto Ferrero Doria, urólogo del Servicio de Urología del Hospital IMED Valencia; el doctor Antonio Benedicto Redón, jefe del Servicio de Urología ydel programa en Cirugía Robótica Da Vinci; la doctora Encarna Reche Santos, médico del Servicio de Oncología clínica; el doctor Pablo Soler Catalán, coordinador del Servicio de Oncología Radioterápica; y el socio de la Asociación ANCAP, Pablo Caballero Navarro, dialogan sobre la enfermedad.
«La tecnología de última generación permite todas las líneas de tratamiento dirigidas al cáncer de próstata. Gracias a esta tecnología conseguimos hacer un tratamiento muy preciso con nuevas terapias dirigidas para ofrecer alternativas al paciente con más calidad de vida.
En pacientes que antes se les supeditaba tratamientos con menos potencial curativo, ahora hemos aumentado la supervivencia y labuena calidad de vida con mejores tratamientos y que requierende menos sesiones», explicó el doctor Pablo Soler.
Tecnología puntera
El factor humano más la tecnología punta es la clave del éxito en el tratamiento de esta enfermedad, coincidieron todos los profesionales médicos del hospital valenciano, que cuenta en su Unidad de Cirugía Robótica con un robot quirúrgico da Vinci Xi para realizar intervenciones complejas con la máxima precisión.
El cirujano no opera con sus manos, sino manipulando un robot a distancia, permaneciendo sentado en una consola instalada dentro del quirófano, y el sistema computarizado transforma el movimiento de las manos en impulsos que son canalizados a los brazos robóticos.
Así, se logra una mayor precisión quirúrgica, un procedimiento menos invasivo, la eliminación del temblor natural de la mano del cirujano y una mejor visualización del campo anatómico a operar.
«La tecnología en el siglo XXI se ha impuesto, pero siempre tiene que ir acompañada por la profesionalidad. La mejor tecnología no puede ser entendida si no es llevada por el mejor profesional. El uso del robot Da Vinci permite aportar al paciente muchas cosas que nuestras manos no eran capaces de dar.
Esta tecnología punta lo que busca es diferenciarse del resto. Pese a que la inversión fue muy importante, desde el hospital apostaron por lo mejor y se ha demostrado que, además de ser un coste efectivo, la calidad que se ofrece a los pacientes es muy alta comparado con los mejores centros españoles o europeos de este ámbito.
El gran aporte de todas estas técnicas mínimamente invasivas en respetar la incontinencia y disfunción eréctil y, aunque no son aprendizajes fáciles, pero conforme ves la evolución y lo que aportas al paciente te enorgullece el esfuerzo que has invertido», contó el doctor Antonio Benedicto.
Además, el doctor Soler reiteró que gracias a la tecnología y el equipo que tienen a su alcance pueden ofrecer tratamientos y técnicas de última generación con una buena precisión al tratamiento del cáncer con buena tolerancia por parte del paciente. «La cirugía robótica es la mejor tecnología que se puede aplicar por su precisión, mínima invasión y recuperación», agregó el doctor Benedicto.
Cribado y el comité de tumores
«El cribado es un examen al paciente para diagnosticarle la enfermedad. Para que tenga sentido debe realizarse, en primer lugar, sobre enfermedades que son muy frecuentes, que tienen un tratamiento eficaz y una fase en la que está asintomático. Después, se debe tener medios diagnósticos seguros, fiables y que no sean agresivos para el paciente. Esto lo reúne el cáncer de próstata, una enfermedad muy prevalente sobre la que hemos descubierto que con un tratamiento precoz podemos reducirla tasa de mortalidad y aumentar la calidad de vida», expuso el doctor Ferrero.
Respecto a esto, el urólogo quiso dejar claro que una persona no debe tener necesariamentesíntomas cuando tiene cáncer.«El ciudadano cuando tiene problemas a la hora de orinar enseguida se alarma. Un señor puede tener muchos síntomas y problemas a la hora de orinar y lonormal es que tenga una próstata benigna. En cambio, puede tener el peor de los cánceres y notener ningún síntoma.
El cáncer de próstata en su fase inicial semantiene sin síntomas, si los hayes que ya está muy avanzado y queremos evitarlo».
«Según los estudios, sabemos que puede disminuir la incidencia y reducir la mortalidad un 21 % entre los 55-69 años. Por ello, tenemos que realizar ese cribado en etapas tempranas, a partir de los 50 años, en general, y siempre explicando al paciente en qué consiste y que quiera realizárselo. Hay pacientes que no quieren saber para vivir felices y tranquilos, aunque se ha producido un cambio importante desde que yo empecé hasta hoy y los varones se están concienciando mucho», agregó.
Mientras, la doctora Encarna Reche explicó que en el hospital cuentan con un comité de tumores que es un encuentro de profesionales que atienden al paciente desde una visión multidisciplinar. «Comentamos el caso en global, cada especialidad aporta su punto de vista y se exponen factores que podrían ser útiles en el tratamiento del paciente.
La existencia de este comité tiene como objetivo la calidad de atención al paciente, puesto que es muy útil no hacer tantas consultas en términos de tiempo o evitar la repetición pruebas», analizó Reche, mientras que Soler agregó que «es interesante que dos especialistas ante un mismo problema tengan varias soluciones. El paciente está en el centro y, después de las opiniones, nos declinamos por una solución quirúrgica o radioterapia. Es bonito que los compañeros te sugieranque hagas un tratamiento desde la sinceridad, honestidad y con base buena».
Acompañamiento emocional Más allá de la tecnología, el factor emocional también entra en juego en esta enfermedad y todos los expertos de la mesa coincidieron en la importancia del acompañamiento emocional del paciente. «Esta situación es un poco extrapolable al cáncer de mama en la mujer. Hay que sacarlo en la consulta, hay que preguntar si hay problemas de impotencia, disfunción eréctil, emocionales… Todo lo que sea importante para el paciente tiene que ser importante para el médico, no solo lo puramente médico», expresó Reche.
«Es fundamental para el paciente que los médicos le acompañen, porque cuando te detectan el cáncer te pegas un golpe tan grande que desconfías de todo. Por ejemplo, cuando te dan el tratamiento de la castración, que te influye tanto con depresiones brutales y te sientes vulnerable, tener alguien que te acompañe es muy importante.
Te surgen muchísimas dudas y es vital tener contacto con alguien que te resuelva tus inquietudes porque reaccionas totalmente diferente a como te comportabas antes», cuenta Pablo Caballero.
Además, el socio de ANCAP contó que la asociación, que está formada por pacientes, familias, sanitarios e investigadores, tiene como objetivo dar apoyo a los que sufren esta enfermedad. «Mediante grupos de WhatsApp intercambian problemas, piden ayuda a urólogos y oncólogos que se encuentran en él y que les aconsejan personalmente después. Exponen las ansiedades y los miedos que tienen». Sobre esto, los profesionales coincidieron en que la empatía es fundamental para tratar al paciente, a quien hay que hacerle ver que, si no funciona un tratamiento, existen muchos otros.
«Las primeras consultas cuando conocemos al paciente son mucho más largas, hay que explicar muy bien en qué punto estamos e informar al paciente y diferenciar de la información con la que viene integrada de experiencias de conocidos. La relación de confianza y empatía entre médico y paciente es crucial», dijo el doctor Soler, mientras que Benedicto agregó para finalizar que «hay que dejarle ventanas abiertas al paciente para que vea que su problema tiene solución y que existen muchas opciones por donde podemos escapar de ese mal diagnóstico».